En mis diarias caminatas por Belgrano puedo observar una enorme cantidad de violaciones a las ordenanzas, las cuales aparentemente el GCBA no parece detectar, no sé si es por falta de inspectores o por incapacidad para hacerlas cumplir.
Estoy en Belgrano R y caminando por la vereda de la calle Conde, frente a la Plaza Castelli, hay dos conocidos negocios gastronómicos que ocupan el 90% de la vereda con sus mesas, en especial los sábados y domingos, haciendo casi imposible circular. Nadie lo ve ni actúa, pero quizás sea mejor así, antes que se les ocurra la “genial” idea de instalar un deck.
Por la zona, hay un lavadero en el que secan y lustran los autos sobre la vereda dificultando el paso de la gente, pero como siempre, no hay ninguna autoridad Comunal que lo vea. En Juramento, Sucre y La Pampa, EDENOR está reparando cajas y cables de transformadores para mejorar el servicio, pero finalizado el trabajo, dejan olvidadas y tiradas las vallas de contención en la vereda, lo que es peligroso y molesta al paso.
Lo que me canso de ver caminando por Belgrano, es la cantidad de autos mal estacionados y ahora han proliferado camionetas chicas especialmente de empresas de telefonía y cable con largas escaleras montadas sobre el techo y que sobresalen de los extremos del vehículo. Está prohibido y son peligrosas, una vez más no hay autoridad que los controle.
No cabe duda que el sistema de controles del GCBA para ordenar, controlar y hacer cumplir las leyes y ordenanzas deja mucho que desear, no se si por incapacidad o falta de voluntad, lo cierto es que se vive en un libre albedrío.
Guido Franz