El 4 de julio, a 42 años de la “Masacre de San Patricio”, en la que fueron asesinados tres sacerdotes y dos seminaristas de la congregación palotina, se colocaron “Baldosas por la Memoria” en la vereda de la parroquia San Patricio ubicada en Estomba y Echeverría. En las placas conmemorativas figuran los nombres de los palotinos asesinados.
Del acto organizado por la comunidad palotina y por “Barrios por Memoria y Justicia”, participaron vecinos, familiares y allegados de las víctimas, referentes de organismos de Derechos Humanos y representantes de organizaciones sociales, políticas, culturales y religiosas.
En la madrugada del 4 de julio de 1976, un grupo de tareas asesinó a los sacerdotes Alfredo Kelly, Alfredo Leaden y Pedro Dufau, y a los seminaristas Emilio Barletti y Salvador Barbeito, en el interior de la casa parroquial. Los cuerpos fueron encontrados a la mañana, por el joven organista Rolando Savino. Los principales medios de comunicación atribuyeron los homicidios al “extremismo” y la Justicia nunca pudo identificar a los autores materiales del quíntuple crimen.
Homenaje en la Legislatura
La diputada Paula Penacca organizó una conferencia en el Salón Perón de la Legislatura Porteña para “mantener viva la memoria” de lo que fue un “hecho del terrorismo de Estado”.
Guillermo Oliveri, ex secretario de Culto de la Nación analizó el período comprendido entre 1968 y 1976, cuando se desencadenó la muerte de los sacerdotes palotinos en la Parroquia San Patricio de Belgrano.
Fortunanto Mallimacci, profesor de la Universidad de Buenos Aires, resaltó que “la comunidad palotina tiene el coraje de seguir haciendo memoria por la sangre derramada”.
Fernando González, integrante del colectivo Kevin O’Neill, afirmó que los palotinos asesinados fueron “5 mártires” y que nunca abandonaron su apostolado; ya que en el nuevo contexto su opción fue por “los pobres y los jóvenes”, con un “compromiso socio político integral”.