El gobierno porteño en conjunto con el Banco Ciudad, presentó la “Cuenta Consorcio”, una cuenta corriente gratuita que cubre todas las necesidades de los consorcios como el pago a proveedores, la inclusión de las cuentas sueldo para el personal y distintas líneas de créditos que permitirán mejorar la situación de los edificios.

Además, el Banco Ciudad otorgará a cada consorcista e inquilino una caja de ahorro gratuita y una tarjeta de débito asociada a la misma, que les permitirá acceder a todos los descuentos y beneficios que la entidad bancaria ofrece en convenio con supermercados, tiendas de electrodomésticos, comercios de ropa, restaurantes, librerías, etc. Asimismo le permitirá realizar el pago de expensas en forma electrónica.

Para hacer la apertura de la cuenta consorcio, el administrador del consorcio deberá presentar su número de matrícula, una copia certificada de su última acta de designación (o renovación en el cargo); DNI original y copia, y constancia CUIT. Del consorcio se requerirá el CUIT y una copia del Reglamento de Copropiedad. Presentada la documentación, el servicio estará disponible dentro de las 72 horas hábiles. Se puede iniciar el trámite en cualquier sucursal del Banco Ciudad o en la Web: https://www.bancociudad.com.ar/institucional/micrositio/cuenta_consorcio

Aquellos consorcios que ya poseen una cuenta en el Banco Ciudad, deben presentarse en la sucursal en la que la radicaron para convertirla en una cuenta Consorcio y conseguir así la bonificación del 100%.


Esta medida es la cuarta, de un total de 14 que componen el plan para hacer bajar los costos operativos que conforman las expensas. Con las cuatro medidas implementadas, los consorcios pueden ahorrar hasta $ 40.200 en un año. Una vez que se apliquen las 14 medidas, se calcula que cada vecino que viva en un edificio tipo de 10 pisos con 20 unidades funcionales, podrá ahorrar alrededor de $ 4.900 pesos por año en el pago de expensas.

La legislatura ya aprobó en primera lectura la medida que establece que ya no será obligatorio construir edificios con vivienda para encargados, lo que permitirá que todas las unidades aporten al pago de las expensas. Este cambio representa un incremento en la recaudación para los nuevos edificios de 57.800 pesos al año. Además, ya no será necesario construir ni mantener las instalaciones fijas secas contra incendio, dado que esas mangueras que se encuentran enrolladas en los descansos de las escaleras en la actualidad no son utilizadas por los bomberos, sin embargo, su mantenimiento es obligatorio y cuesta unos 21 mil pesos por año en promedio.