En el barrio de Colegiales, avanzan con los trabajos para terminar la Plaza Clemente (delimitada por las calles Concepción Arenal, Enrique Martínez, Conde y la Av. Dorrego), para fines del mes de junio.
Desde el año 1991, cuando el predio fue usurpado, los vecinos vienen luchando para conseguir que se haga esta plaza. En el año 2007, la Legislatura porteña aprobó la Ley Nº 2.567, que categorizó definitivamente al predio como plaza, que llevaría el nombre de Clemente, en honor a Caloi. Sin embargo, en ese momento el Gobierno de la Ciudad antepuso como prioridad la realización de las reformas en el Mercado de Pulgas y dispuso que el terreno de la plaza albergara a los feriantes hasta que se concluyeran las reparaciones. En el 2015, el Jefe de Gobierno, Mauricio Macri, llamó a una licitación pública para la construcción de cocheras subterráneas en el lugar. En el 2016, Horacio Rodríguez Larreta, adjudicó la obra del estacionamiento a la UTE (Unión Temporal de Empresas). El plan presentado por estas empresas no solo incluyó las 250 cocheras subterráneas, sino también locales comerciales sobre el predio, con terrazas verdes.
Se hicieron amparos, se realizaron movilizaciones, ruidazos, asambleas, festivales, más de 20 vecinos disertaron a favor de la plaza en una audiencia pública y esta lucha, finalmente tuvo un final feliz.
La plaza tendrá un diseño de “gota”, lo que generará varios espacios comunicado entre sí con diversos usos: lugares de encuentro, mesas comunitarias, observatorio de mariposas, espacios de contemplación y juegos inclusivos. Además se acondicionarán las veredas y Conde tendrá una sola mano hacia Dorrego y se nivelará, convirtiéndose en una calle de 4 metros de ancho delimitada por bolardos. Sobre la vereda de Conde habrá una línea de tiempo con los hitos barriales más importantes elegidos por los vecinos. Su diseño emulará las vías de tren, como homenaje a la historia ferroviaria de Colegiales. En los muros que dan a la misma calle se hará una intervención con murales conmemorativos de Clemente.
Se incluirá 100% de forestación nativa organizada en tres regiones naturales (pastizal, selva marginal y talar) lo que permitirá cultivar especies que atraigan aves y mariposas. También se armará un circuito educativo
para conocer las características de la vegetación, su región de origen y cómo colabora con el equilibrio del ecosistema.
Se colocarán rampas para personas con dificultades de movilidad, y una señalética ideada para brindar información a las personas no videntes. También incorporarán juegos inclusivos.