Desde el Consejo Nacional de Educación, por iniciativa del Dr. Estanislao Zeballos, en el año 1900, se estableció el 29 de agosto como el “Día del Árbol” en la República Argentina, con el objetivo de concientizar a la gente sobre la necesidad de plantar árboles y proteger las superficies arboladas.
Los árboles representan el hogar de varias especies de fauna local que interactúan entre sí, además cumplen funciones útiles como la de moderar los efectos de las lluvias extremas, absorber gases de efectivo invernadero y contaminantes, regular el clima de su entorno y contribuir a la purificación del aire.
Según el último censo fitosanitario realizado en el año 2018, en la ciudad de Buenos Aires, hay 421.718 árboles, de los cuales 367.157 están en las calles y 54.561 en espacios verdes. La variedad de especies que hay es enorme. Las que son aptas para la ciudad son: Arce tridente, Fresno dorado, Crespón, Fotinia, Ciruelo de flor, Viscote, Pata de Buey, Anacahuita, Fresno americano, Ligustro disciplinado, Jacaranda, Liquidambar, Tulipanero, Cedro misionero, Arce dorado, Lapacho rosado, Plátano, Tilo, Ibira-pitá, Tipa, Falso castaño, Pezuña de vaca disciplinada, Castaño, Catalpa, Almez, Árbol de Judas, Ceibo de Jujuy, Parasol de la china, Árbol de oro, Palito dulce, Nogal criollo, Plátano Americano, Lapachillo, Algarrobo blanco, Roble de Eslavonia y el Lapacho amarillo
En las veredas de Buenos Aires se pueden encontrar algunas especies que figuraron en el listado como aptas pero se las retiró por distintos motivos: El Limpiatubos, porque es un arbusto que invade todo el espacio y crece mucho, el árbol de la seda porque tiene un crecimiento muy despatarrado y bajo de copa y pierde todo el tiempo flores y luego las vainas, el Timbó u oreja de negro porque los frutos y el tamaño final es muy grande y tiene un sistema radicular que pulveriza las veredas.
No están permitidas especies con espinas ni frutales. Algunas especies que pueden encontrarse en las veredas de la ciudad no se adaptan al arbolado viario. La lista incluye: ciprés, roble sedoso, haya, palo borracho, algarrobo blanco, sauce criollo, magnolia, aguaribay, ceibo (el criollo) y el ficus.