Los días 7 de cada mes, y en especial el 7 de agosto día de la fiesta grande de San Cayetano, la parroquia se agranda para recibir y abrazar a todos los que llegan hasta el patrono bendito del pan y del trabajo. Ese día todos son vecinos aunque vivan lejos, todos se sienten en su propia casa aunque hayan viajado mucho para llegar. Ese día la imagen del santo sale al barrio y recorre sus calles para recordarnos a todos que él camina en medio nuestro, que él se hace nuestra voz para pedirle a Dios el pan que alimenta y el trabajo que dignifica.
Este 07 de agosto de 2020, por razones de público conocimiento, la parroquia San Cayetano (Vidal 1745) permanecerá cerrada. Por tal motivo, están todos invitados a participar de la celebración a través de las redes sociales.
La programación para este 07/08 es la siguiente:
- 00 horas: Misa virtual de apertura presidida por Mons. Alejandro Giorgi.
- 11 horas: Misa virtual P. Juan Francisco.
- 14 horas: Rosario Virtual.
- 17 horas: Catequesis virtual de niños.
- 18 horas: Adoración virtual.
- 19.30 horas: Misa Virtual presidida por el cardenal Arz. Mario Aurelio Poli.
- 9.30, 12.30 y 15 horas: Bendición de hogares y objetos religiosos por las redes.
Se puede acceder a las redes sociales de la Parroquia San Cayetano desde los siguientes enlaces: Instagram – Youtube – Facebook
Historia de la Parroquia
La parroquia San Cayetano de Belgrano se originó desde el corazón y la mente de un cura que supo ver que al barrio le estaba haciendo falta un lugar de gracia, de encuentro con Dios y de comunión fraterna. El padre Alberto Manuella con el apoyo del entonces párroco de la Redonda, Monseñor Filippo, encaró la construcción y organización de la nueva parroquia. Confiando siempre en la Providencia de Dios, con paciencia y perseverancia dio los pasos necesarios para que el 12 de agosto de 1972 fuera consagrado el templo definitivo, diez años después de que la imagen de San Cayetano, donada por las hermanas siervas de San José, llegara a la primera casa donde había comenzado a funcionar la parroquia. Hoy los restos del padre Alberto se encuentran en el atrio del templo parroquial y desde el cielo, sigue acompañando a esta comunidad que camina en el barrio, bajo la protección de San Cayetano.