Hace unos años publicaron en la Web del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires lo siguiente: “Si la idea es pasar una velada romántica y original, una propuesta interesante es ir a ver o participar del show de tango en la glorieta de Barrancas de Belgrano”. En este “Día de los enamorados”, no será posible disfrutar del tango en la glorieta.

Norma Juarez, a través de la Web change.org lanzó una petición dirigida a Horacio Rodríguez Larreta (Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires) solicitando la habilitación con Protocolos Sanitarios de la Glorieta de Belgrano para la difusión del Tango.

En la petición se detalla lo siguiente:

La Glorieta de Belgrano funciona para difusión, práctica y aprendizaje del Tango desde fines del siglo pasado. Es reconocida internacionalmente como el mejor lugar al aire libre del mundo para bailar tango. En tiempos normales, a diario, asisten bailarines de diferentes países. Es un punto de visita obligatorio para todo turista de Tango. La Glorieta de Belgrano es símbolo de la cultura nacional y baluarte del Tango como patrimonio cultural intangible de la humanidad”.

Varios firmantes expresaron su apoyo:

“El Tango es integrador, sanador y  ayuda a combatir padecimientos emocionales generados durante esta pandemia. Los protocolos implementados por bailarines son los mismos que usan las cervecerías, los bares y los clubes deportivos”. “Para que el tango sobreviva al Covid y porque cuando se baila no se habla”. “Creo que con el protocolo correspondiente se puede bailar”. “Apoyo la continuación de La Glorieta”. “La familia milonguera necesita este lugar”. “Necesitamos bailar, es nuestro cable a tierra al aire libre y con barbijo”. “Tendrían que tener en cuenta a los espacios públicos al aire libre, cómo casi la única alternativa para realizar actividades”. “Los deportistas ya tienen su habilitación, al igual que los gimnasios, las piletas, los bares y playas, las academias de danza también, ¿por qué no el baile popular en este lugar que es al aire libre?”. “Desde que volví a bailar a La Glorieta mi vida y estado mental y anímico cambio positivamente, con barbijo, alcohol y al aire libre hay menos riesgo que en un supermercado”.

Se puede firmar la solicitada haciendo un clic aquí.

Historia del lugar

La Glorieta está ubicada en las Barrancas de Belgrano, en la segunda manzana, entre las calles 11 de Septiembre, Sucre, Virrey Vértiz y Echeverría. Fue construida en 1910 y su nombre rinde homenaje a Antonio Malvagni, creador y director de la Banda Municipal de Buenos Aires. Malvagni nació en Potenza, Italia, en 1867. Tocaba el cornetín. Llegó a Buenos Aires en 1887 y fue puesto al frente de la banda del Regimiento 1° Artillería de Córdoba. Actuó también en Tucumán y Salta. Más adelante, el entonces presidente Dr. Figueroa Alcorta le confirió la creación de la Banda Municipal de Buenos Aires durante la intendencia de don Manuel Güiraldes. Dirigió el conjunto de 120 músicos hasta 1928, año en que se retiró.

La construcción de La Glorieta tuvo como primer objetivo alojar a las orquestas y a las bandas de música que ofrecían sus conciertos al aire libre. Su base es de material, pero todo lo demás está construido en hierro. Las columnas son delgadas y bastante ornamentales, corresponden a lo que en arquitectura se conoce como estilo de la Revolución Industrial en donde se usaba el hierro como material de gran resistencia para diversas estructuras. Se accede por medio de una escalera de mármol de carrara. Su techo, en forma de pagoda, está sostenido por las columnas y, originalmente, tenía el piso de madera hasta que en 1992 sufrió un incendio. Años después fue reconstruida y se hizo el piso con baldosas graníticas. La Glorieta también fue usada por oradores políticos y para arengas patrióticas. Además, sirvió de tribuna para debatir temas de interés social como el divorcio, el 20 de agosto de 1983. Asimismo, fue escenario para la ficción en la historieta “El Eternauta”, de Héctor Oesterheld. Antes de la pandemia, se convertía en una pista de baile con el tango como protagonista.