Corresponde usar la bocina sólo cuando se debe advertir de una situación potencialmente peligrosa a otros conductores o peatones y siempre que no sea posible o haya sido infructuosa la utilización de otro tipo de señal. Una bocina suena a 90 decibeles, algo que está muy por encima del límite de 65 decibeles que es considerado como aceptable. Por ello, se debe utilizar sólo en este tipo de situaciones; siendo motivo de sanción su uso indebido. Sin embargo, muchos conductores parecen ser “bocineros compulsivos” y suelen descargar su furia tocando la bocina. Si un peatón cruza mal, le clavan la bocina, si el auto de adelante va despacio realizan una combinación de luces y bocina, si el semáforo está en rojo mucho tiempo tocan bocina y si un equipo sale campeón, festejan con la bocina.
En las redes sociales, algunos vecinos manifestaron su opinión con respecto a las bocinas.
“Amigos conductores de autos, entiendo que quieran llegar rápido a su destino, pero sus insistentes bocinas solo provocan muchas molestias a los vecinos y transeúntes, a las mascotas y a las personas que necesitan o quieren descansar. Además, no hay registro en la historia de la humanidad en la que una situación de congestión de tránsito se haya resuelto gracias a que los conductores de los vehículos tocaron la bocina como unos desquiciados”.
“Muchas veces una bocina delicada y cariñosa, despierta al otario que está saciando su ansiedad de leer su celular en el semáforo y no arranca cuando se pone verde”.
“Lamentablemente a veces es necesario utilizar la bocina cuando algunos conductores manejan mal, dando marcha atrás sin mirar, encerrando a otros autos, etc, etc”.
“Vivo al lado de un colegio sobre la calle Montañeses. Es increíble como tocan la bocina a la mañana los padres que vienen a dejar a sus hijos. Por más que se cuelguen a la bocina, el semáforo no va a cambiar de color ni va a avanzar la fila. Es increíble la falta de empatía con los vecinos aledaños a la institución”.
“Yo haría poner una luz, en el techo de los autos, que se prenda cuando tocan la bocina. Así podríamos identificar al inadaptado que toca la bocina en forma indiscriminada”.
“Pienso que las bocinas deberían sonar dentro del auto de la misma manera que afuera. Así se usarían solo por emergencia”.
“Vivo en Núñez, sobre Ramallo. Cuando baja la barrera, se llena de autos y tocan bocina como locos. ¿Piensan que tocando la bocina, el tren va a pasar más rápido?”.
“Hay personas que creen que si tocan bocina constantemente pueden provocar el cambio de la luz del semáforo”.
“Vivo sobre la Av. Del Libertador. Por el ruido de las bocinas, no se puede dormir”.