La problemática de la gente en situación de calle es una realidad compleja que se genera por múltiples causas. A diario se ven por las calles de los barrios de Belgrano, Núñez y Colegiales, personas durmiendo en donde encuentran un lugar y cada uno de ellos lleva consigo una pesada mochila cargada de frustraciones, miedos, falta de confianza, aislamiento, violencia, hambre y frío.

Los vecinos que vean gente durmiendo en la calle, pueden solicitar asistencia social, comunicándose telefónicamente a la línea 108. Se reciben alrededor de 95 llamados por día y en invierno, la cantidad se incrementa. Los equipos móviles del BAP (Buenos Aires Presente), recorren la ciudad para ayudar a los que no tienen un techo.

En Buenos Aires funcionan 27 refugios de manera regular, las 24 horas, todo el año. Algunos son para hombres, otros para mujeres, y también hay para familias. Varios de los refugios operan también como centros de día. En los paradores hay personal preparado para atender a cada una de las personas que ingresan, con el objetivo de impulsarlos a retomar un proyecto de vida. Si los asistidos son menores de edad, se trabaja en conjunto con el Consejo de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes para salvaguardar sus derechos.

Entre el 1 de junio y el 31 de agosto, se activa el denominado “Plan Prevención Frío” que incluye la apertura de tres paradores adicionales, brindando un total de 2.300 plazas disponibles en los distintos refugios, más de 40 móviles transitando la Ciudad y un trailer con bebidas y alimentos calientes. Para hacer esto posible, trabajan unas 700 personas, incluyendo operadores sociales y psicólogos.