Los vecinos que viven en las cercanías del estadio Monumental, se quejan permanentemente por la desorganización en la previa de los partidos y el estado en el que queda el barrio después de los encuentros.

Ricardo Scorticati: En Av. Del Libertador y Udaondo, pegado al banco Galicia, la vereda quedó en un estado calamitoso por falta de limpieza después del partido disputado en el Monumental el sábado 18 de Agosto por la noche. Ese mismo día tuvimos grandes inconvenientes para acceder a la parroquia Santiago Apóstol con motivo de un casamiento. Al novio vestido de gala, no le permitían el acceso al barrio. El director de relaciones institucionales fue a gestionar los accesos a los concurrentes y el agente a cargo de esa esquina se negó a todo razonamiento atento a que sus instrucciones eran que por allí no pasaba nadie. Logramos que accediera el novio a pie abandonando el vehículo con su abuela dentro del mismo. Fue una vergüenza la organización del
evento.

Elvira: El 29 de agosto cuando jugaron River y Racing, alrededor de las 18.30 horas estaba lleno de trapitos en la calle Iberá y 3 de Febrero, los autos en las esquinas estacionaban arriba de la vereda. Realmente era un caos. Los trapitos estaban en su salsa también en la calle Guayra. Por la zona de 3 de Febrero y Manzanares no había ninguna vereda libre para poder pasar y las rampas todas tapadas.

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